Antecedentes.

En la década de los años ochentas, las dificultades económicas del país causaron una contracción del mercado, que obligó a las aerolíneas troncales a recortar algunas rutas domésticas y a replegarse a los mercados más rentables. Los problemas financieros y operativos condujeron a la quiebra de Aeroméxico y a su privatización en 1988, siguiendo el mismo camino Mexicana de Aviación un año después.

Estos cambios abrieron un nuevo orden en el transporte aéreo nacional, que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes puso en marcha con un esquema rector que reestructura los servicios aéreos en tres niveles: troncal-nacional, troncal-regional y regional-alimentador; para servir a mercados específicos, conforme a la demanda y a las distancias por recorrer. Con estas condiciones favorables, las aerolíneas regionales surgieron y se extendieron, no sólo a los mercados abandonados por las empresas troncales, sino descubriendo otros que carecían de atención adecuada.

Empresas.

En 1987, operaban en México sólo cuatro aerolíneas regionales, con una flota de ocho aeronaves, formando una mínima red de rutas. Al finalizar 1989, ya eran doce las empresas, con una flota conjunta de 28 aeronaves, que operaban regularmente en 71 rutas. El Cuadro 1 muestra la evolución del sistema aéreo regional a partir de ese año.

FUENTE : Dirección General de Aeronáutica Civil, S.C.T.

Entre 1991 y 1995, se presentó un ajuste en el sistema, por la suspensión de operaciones de cuatro empresas, SARO, Aeromonterrey, Aerovías Oaxaqueñas y Servicios Aéreos Leo López y por la fusión de Aerovías del Poniente con Servicios Aéreos Litoral, lo que llevó a la composición del sistema para 1995, con dos empresas troncales-regionales [1] y 12 en el nivel regional-alimentador.

Todas las aerolíneas regionales registradas hasta 1995, estaban constituidas por capital privado. El nuevo ambiente operativo se orienta hacia la economía de mercado, que se ha manifestado en la integración y formación de alianzas entre empresas de distinto nivel y los primeros intentos de competencia en algunos segmentos de mercado.

Regiones.

De acuerdo a la ubicación de los centros de operación de las empresas y a la cobertura y extensión de sus rutas, es posible agruparlas en las seis regiones geográficas presentadas en el Cuadro 2:

El surgimiento de empresas regionales ha propiciado un mayor uso de la infraestructura aeroportuaria, ya que todos los aeropuertos administrados por ASA están incluidos en los itinerarios regionales. En varios de ellos es el único servicio regular existente y en otros es el enlace entre los niveles regional y troncal.

FUENTE : Martínez Alejos, Ramiro, La aviación Regional en México - 1991, Publicación Técnica Nº. 62 Instituto Mexicano del Transporte, Sanfandila, Qro., 1995.

Flota.

La adquisición de aeronaves es una inversión inicial considerable para las empresas y su selección requiere del balance de los factores de la organización de las propias empresas con las necesidades de los usuarios. La selección de aeronaves tendrá efectos como, por ejemplo, que las empresas opten por prestar el servicio con aviones pequeños y con más frecuencias, lo que podría generar congestionamientos en aeropuertos y limitar la posibilidad de ofrecer tarifas atractivas. Por el contrario, si se usan aviones de mayor capacidad con menos frecuencias, podrían limitarse los enlaces con otras regiones.

La flota creció de 28 aeronaves en 1989 a 86 en 1995, con una tendencia a aumentar el número de aeronaves con capacidad de 18 a 20 asientos, apropiadas para rutas cortas en el nivel regional-alimentador y de 82 a 150 asientos, adecuadas para rutas de largo alcance en el nivel troncal-regional. El número total de asientos de la flota aumentó, entre 1989 y 1995, con una tasa de crecimiento media anual de 21.18 %, lo que es un indicativo razonable del crecimiento de la oferta (ver Cuadro 3). También ha habido una tendencia favorable en la edad de las aeronaves, que ha disminuido de un promedio de 29 años de antigüedad del modelo, a 19 años, lo que es efecto de la introducción de aeronaves ATR-42 de Aerospatiale/Aeritalia y Fairchild Metro III/23 de reciente manufactura y a pesar de la incorporación de aeronaves Douglas DC-9 y Boeing 727 y 737, con antigüedad cercana a los 30 años, pero apropiadas para rutas del nivel troncal-regional.

FUENTE : Elaboración propia con datos de La Aviación Mexicana en Cifras, D.G.A.C., 1989-1995 y The Word's, I.A.T.A., 1984.

Tráfico.

De 1989 a 1995, la cantidad de pasajeros transportados por la aviación regional tuvo una tasa de crecimiento media anual de 22.6 %, mientras los transportados por toda la aviación regular nacional aumentaron con una tasa media anual de 5.3 %. Desde luego que este notable crecimiento del tráfico manejado por las aerolíneas regionales, se debe a su creciente participación en el manejo del tráfico total, como se muestra en el Cuadro 4.

Las aerolíneas regionales que transportaron el mayor número de pasajeros en 1995, fueron Aerocalifornia con un poco más de un millón, Aerocaribe/Aerocozumel con 544 mil, Servicios Aéreos Litoral con 523 mil, Aviaxsa con 498 mil y Aeromar con 306 mil (DGAC, 1996). Estas seis empresas cubrieron el 84 % del tráfico regional total en ese año.

FUENTE : Elaboración propia con datos de la Dirección General de Aeronáutica Civil, S.C.T.

Conclusiones.

En pocos años, la expansión de la aviación regional en México ha sido acelerada. Su cobertura se ha extendido a todas las ciudades importantes, se han definido las regiones geográficas de cada empresa y han surgido las ciudades que serán los centros distribuidores de tráfico.

Se espera un crecimiento moderado de la flota aérea y que las empresas tiendan a un uso más intensivo de sus equipos. Como la mayoría de las empresas ha reducido la diversificación de sus equipos, se espera que varias más continúen con la modernización de su flota, eliminando las características adversas de capacidad, antigüedad y diversidad de modelos.

El tráfico de pasajeros, seguramente proseguirá las tendencias de crecimiento, como consecuencia natural de la consolidación de los servicios.

[1] Se han considerado dos aerolíneas con rutas en el nivel troncal-regional, Aerocalifornia y AVIACSA, así como algunas rutas de Transportes Aéreos Ejecutivos (TAESA), aunque esta última empresa opera en el nivel troncal-nacional.

Bibliografía.

DGAC, La Aviación Mexicana en Cifras, 1989-1995, Dirección General de Aeronáutica Civil, S.C.T., México, 1996.

HEREDIA ITURBE, Francisco, La Situación de la Aviación Regional Regular en México en 1989, Publicación Técnica Nº 22, Instituto Mexicano del Transporte, Querétaro, 1992.

MARTINEZ ALEJOS, Ramiro, La Aviación Regional en México-1990, Publicación Técnica Nº 38, Instituto Mexicano del Transporte, Querétaro, 1992.

MARTINEZ ALEJOS, Ramiro, La Aviación Regional en México-1991, Publicación Técnica Nº 62, Instituto Mexicano del Transporte, Sanfandila Qro., 1995.