Notas
 
Instituto Mexicano del Transporte
Publicación bimestral de divulgación externa

NOTAS núm. 27, marzo-abril 1996, artículo 3
Desarrollo de equipo bimodal en Europa
 

Uno de los campos más dinámicos en el desarrollo de equipo intermodal lo compone la familia de sistemas bimodales carretera/ferrocarril, que comprende remolques de camión que pueden transformarse en carros ferroviarios sin emplear costosos equipos de arrastre o requerir servicios adicionales para su manejo en terminales.

Hasta hace relativamente poco, el concepto bimodal se usó nada más en Estados Unidos, donde surgieron ideas como el Roadrailer, un remolque de autotransporte susceptible de acoplarse a un tren. Hoy, tan sólo en Europa existen alrededor de diez diseños diferentes que se han probabo en Francia, Alemania, Italia, Inglaterra, España y Noruega.

Uno de los diseños bimodales más recientes, lanzado al mercado por la industria francesa, es el remolque ferroviario, desarrollado en conjunto por especialistas en tecnología ferroviaria y por fabricantes de remolques carreteros tradicionales.

El remolque ferroviario tiene un diseño parecido al de los remolques carreteros convencionales. Por ejemplo, emplea tres tipos de neumáticos muy comerciales; se le ha incorporado una suspensión de aire y se le ha dotado de una capacidad vehicular de 33 tarimas de carga, equiparable a la de la mayoría de los remolques en el mercado. El remolque ferroviario, sin embargo, difiere de los vehículos carreteros tradicionales en varios aspectos. La estructura del remolque está reforzada para resistir fuerzas de 80 toneladas en tensión o compresión cuando se incorpora al ferrocarril; la defensa trasera es retráctil; y los ejes se aseguran en una posición elevada para no obstaculizar el movimiento en vías, ya que la base rodante es suministrada por dos carretones o boogies de ferrocarril.

La operación del remolque en el modo ferroviario se logra acoplándole dos carretones independientes que soportan cada extremo del remolque y que limitan la transmisión de fuerzas de torsión. La conexión entre el remolque y los carretones se logra con base en dos candados gemelos automáticos colocados sobre el carretón, lo que permite una operación sencilla y económica.

Dado que el sistema de conexión es simétrico respecto a un eje transversal del remolque, éste puede desplazarse horizontalmente como parte de un tren común y corriente. El movimiento vertical del remolque se efectúa mediante sistemas levadizos tradicionales en los remolques del autotransporte. La simplicidad de la interfaz puede propiciar que en el futuro estos remolques puedan usarse con otros tipos de carretones.


Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo., Investigador del IMT

 

 
Cerrar ventana