Notas
 
Instituto Mexicano del Transporte
Publicación bimestral de divulgación externa

NOTAS núm. 150, SEPTIEMBRE-OCTUBRE 2014, artículo 2
Diagnóstico Socio-Económico en la Región del Corredor Transístmico
CRUZ Gabriela, HERNÁNDEZ Salvador y LELIS Martha

Introducción

El objetivo general del estudio es la descripción analítica de la evolución reciente (de 2000 a 2010) de las principales características socio-demográficas de los municipios que están dentro de la zona de influencia del Corredor Transístmico, a partir del procesamiento de la información detallada disponible. Esta información se contrasta con la correspondiente a nivel estatal y federal para tener la referencia de la situación social de los habitantes de dicha zona de influencia. La investigación comprende una descripción detallada de las características socio-demográficas de la zona en estudio, así como las condiciones actuales que presenta el desarrollo económico y social de sus habitantes. Se incluye el cálculo de una serie de indicadores que permitan comparar los principales rasgos del desarrollo social de la región con relación a su contexto estatal y nacional, lo cual permitirá tener una primera base para la identificación de rezagos en dicho desarrollo, pero también de las potencialidades de la población del Istmo.

El análisis cubre la información correspondiente a aquellos municipios y ciudades que quedan dentro del hinterland del corredor inter costero que va de Coatzacoalcos a Salina Cruz. Por otra parte, aunque se revisaron algunos antecedentes históricos, la base para el análisis es la actual disponibilidad de datos (de 2000 y 2010) a nivel municipal de Oaxaca y Veracruz que proporciona el Censo de Población y Vivienda del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Ello se complementó con información específica de la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL), la Comisión Nacional del Agua, la Comisión de Agua Potable y Alcantarillados del Estado, y el Instituto de Salud del Gobierno del Estado de Oaxaca y del Gobierno de Veracruz.

Con el análisis estadístico de la evolución reciente de la estructura económica y social de la región se busca contar con información documental altamente confiable, tal que resulte realmente pertinente para un primer diagnóstico actualizado de los resultados que se tienen con la política de desarrollo regional, enfatizando su incidencia e interrelación con el desarrollo económico y social del corredor del Istmo. En ese sentido, se propone elegir variables clave en el análisis y conformación de la estrategia integral de desarrollo económico regional productivo del proyecto, como son, por ejemplo: población total municipal, porcentaje de mujeres que habitan en los municipios, total de hogares, porcentaje de hogares con jefatura femenina, promedio de ocupantes en viviendas particulares habitadas, características físicas que determinan el nivel de bienestar y salud de los ocupantes de las viviendas particulares habitadas, niveles de escolaridad, servicios de salud, y desarrollo humano y social.

El estudio comprende el análisis de del estado de Oaxaca y 26 del estado de Veracruz. La delimitación de región del Corredor Transístmico parte de considerar como eje articulador al corredor de transporte terrestre (carretero y ferroviario) que une los puertos de Coatzacoalcos y Salina Cruz (véase la figura 1).

 

Figura 1 Localización de la región del Corredor Transístmico

Fuente: elaboración propia, con base en algunas imágenes de Google.

 

Cabe mencionar que no se trata de una simple recopilación de información, ya que se ha hecho un procesamiento de información solamente para los municipios de interés del corredor del Istmo: se construyó una matriz de datos de 99 variables para el análisis a nivel municipal. Los datos presentados para el análisis son cálculos propios a partir de datos municipales, lo cual permite hacer un análisis más detallado de la estructura de los municipios y entidades seleccionadas. Con esta base, y aun considerando las reservas metodológicas y analíticas que la complejidad de todo estudio socio-económico implica, se hace una interpretación preliminar de las causas que pudieran estar explicando los eventuales rezagos sociales detectados.

 

Oaxaca: perfil socioeconómico

El estado de Oaxaca se localiza al sur del país, y está compuesto por ocho regiones, siendo éstas: la región Cañada, Costa, Istmo, Mixteca, Papaloápam, Sierra Norte, Sierra Sur y Valles Centrales. Asimismo, el estado de Oaxaca está integrado por 570 municipios con una superficie territorial de 93,793.3 kilómetros cuadrados.

La población total en todo el Estado de Oaxaca tuvo una tasa de crecimiento anual (entre el año 2000 y el año 2010) de 0.8 por ciento, pasando de 3,438,765 a 3,801,962 personas. En particular, los 38 municipios de Oaxaca que quedan comprendidos en el corredor del Istmo representan aproximadamente el 16% de la población de esta entidad federativa. Así, en esta región residen, en el año 2010, un total de 597,359 personas. En ese sentido, los municipios de Oaxaca en el corredor del Istmo que cuentan con mayor población, son: Juchitán de Zaragoza, Salina Cruz y Santo Domingo Tehuantepec. En cambio, los municipios oaxaqueños con menor población son: Santo Domingo Chihuitán, Magdalena Tlacotepec y San Miguel Tenango. De hecho, éste último municipio también muestra un descenso en la cantidad de habitantes, fenómeno que comparte con los municipios de San Francisco Ixhuatán, Reforma de Pineda, Matías Romero Avendaño, y Guevea de Humboldt.  Esta importante tendencia se explica por la fuerte emigración que se puede asociar a los bajos niveles de vida de la población.

Por otra parte, las mujeres representan, en promedio, entre el 50.6 y el 50.8 por ciento de la población de los municipios analizados (respectivamente, para 2000 y 2010). Esto no es notable por sí mismo. Sin embargo, si se observa un creciente porcentaje de los hogares que muestran jefatura femenina (en promedio, entre el 19.4 y el 21.7 por ciento, en 2000 y 2010 respectivamente) y también una creciente desviación estándar. Esto pudiera deberse a que la población masculina está migrando en búsqueda de mejores oportunidades de empleo. Sin embargo, si bien un poco más del 50% de la población es femenina, sólo alrededor del 20% son jefas de hogar, lo cual podría deberse a que el resto aun recibe sus ingresos de su contraparte masculina. De hecho, en este aspecto, los municipios de este corredor del Istmo, están aún por debajo del promedio estatal.

En lo relativo a los hogares se observa, de manera general que, para los 38 municipios de Oaxaca en el corredor del Istmo, hubo un crecimiento muy bajo  del total de las viviendas particulares habitadas (a una tasa anual entre 0.7 y el 1.0 por ciento), pasando de 124,344 viviendas en 2000 a 156,695 en 2010.  En cambio, el promedio de ocupantes mostró una tasa anual de crecimiento de -0.8 por ciento, en promedio, los ocupantes de las viviendas particulares habitadas disminuyeron, pasando de 4.4 ocupantes en el año 2000 a 3.8 ocupantes en el año 2010.  Así, este aumento en la cantidad de viviendas que es habitada por una ligeramente menor cantidad de personas nos sugiere un incremento ligero en la dispersión de la población, fenómeno que también es observable a nivel del estado de Oaxaca.

De acuerdo al INEGI, en la vivienda se resumen muchas características físicas que determinan el nivel de bienestar y salud de los ocupantes, ya que el conocimiento de las condiciones contribuye a mejorar las condiciones de vida de la población. Estos indicadores son significativos ya que dan cuenta de las condiciones de vida de la población puesto que los materiales de las viviendas son características que se asocian con las condiciones de salud y bienestar.

En el año 2000 poco más del 70 por ciento de las viviendas particulares habitadas de los 38 municipios oaxaqueños del Istmo disponía de piso diferente de tierra, teniendo un importante crecimiento (en promedio de 0.7 por ciento anual) llegando a 84% en 2010. En cambio, la cantidad de viviendas particulares habitadas que disponen de agua de la red pública tuvo un menor incremento en sus tasas de crecimiento (del 0.3), pasando del 73.8 al 77.6 por ciento (entre 2000 y 2010). Es importante señalar que, en ambos aspectos, los municipios oaxaqueños dentro del corredor del Istmo muestran un valor bastante superior al observado a nivel de todo el estado de Oaxaca.

No obstante, cabe resaltar que hay una gran dispersión en el comportamiento de estas variables. Así, mientras que algunos municipios muestran valores muy altos (por ejemplo, para 2010, el municipio de Reforma de Pineda indica un 98% de viviendas con piso diferente de tierra), otros municipios muestran unos niveles demasiado bajo en este parámetro. Así, en el municipio de San Mateo del Mar, el Censo de 2010 encontró que solamente 27.9% de las viviendas tenía piso diferente de tierra. Similarmente, mientras que el municipio de Unión Hidalgo mostraba en 2010 que el 98 % de las viviendas tenía acceso al agua pública, el municipio de Santiago Yaveo se encontraba en el otro extremo de este servicio, puesto que sólo un 7.6% de sus viviendas cuentan con dicho servicio.

Por otra parte, resulta muy importante conocer los servicios de que disponen las viviendas particulares habitadas de los municipios, y sus respectivas tasas de crecimiento. Los servicios públicos son esenciales para los habitantes, ya que por ejemplo, el abastecimiento del agua potable de la red pública, su dotación y cobertura constituye uno de los Objetivos del Desarrollo del Milenio[1].

En especial, en el año 2010, el porcentaje de viviendas que dispone de drenaje en los municipios oaxaqueños en el Istmo es incluso superior al promedio observado en el estado de Oaxaca. En cambio, el porcentaje de viviendas que dispone de sanitario o de energía eléctrica todavía es ligeramente menor que el respectivo promedio estatal, aunque su nivel es realmente alto (poco más de nueve de cada diez viviendas disponen de estos servicios).

No obstante el panorama optimista que se plantea en el párrafo anterior, desafortunadamente la situación no es tan favorable para todos los municipios en análisis. En particular, en la disponibilidad de drenaje en las viviendas hay una gran variabilidad: si bien la desviación estándar ha disminuido de 25.7 a 14.8 entre 2000 y 2010, ésta representa aún una gran diferencia entre municipios. Por ejemplo, mientras que el municipio de Unión Hidalgo muestra una cobertura casi total en este servicio en el año 2010 (con el 98.3% de viviendas con drenaje), en el caso opuesto se encuentra el municipio de San Juan Mazatlán que apenas tiene el 38.6%, aunque esto representaría una enorme mejora puesto que en el año 2000 sólo una de cada diez viviendas de este municipio tenía drenaje.

Por otra parte, la educación escolar que reciben los habitantes tiende a favorecerlos para alcanzar los conocimientos, las habilidades y las competencias para el desarrollo individual y social, y que es el mejor medio para generar transformaciones en la sociedad. Dichas transformaciones se deben reflejar en progreso para la comunidad, principalmente  en el plano laboral y dentro del mercado formal, todo lo cual contribuye a la productividad económica del país.

En el caso de los municipios oaxaqueños comprendidos en el corredor del Istmo, tanto en el año 2000 como en 2010, menos del 50% de la población de 5 años y más cuenta con primaria para ambos años en estudio. En ese sentido, se observa que incluso dicho porcentaje de población con escolaridad primaria tuvo una caída de 0.7 por ciento anual al pasar de 44.6% en 2000 a 39.2% en 2010. Este fenómeno no necesariamente puede interpretarse como un retroceso puesto que puede estar ligado a un avance en los niveles de escolaridad del resto de la población. Así, el porcentaje de población de 18 años y más con nivel profesional tuvo una tasa de crecimiento anual positiva de 1.0 por ciento pasando de 2.7% en 2000 a 5.5% en 2010. Lo mismo sucede con la población de 18 años y más con posgrado, pues tuvo un ligero incremento en promedio en el porcentaje, pasando de 0.1 por ciento en 2000 a 0.2 por ciento en 2010.

Otro indicador es el que se refiere al total de escuelas en educación básica y media superior, el cual tuvo una tasa de crecimiento anual de 0.3 por ciento, pasando de 1,497 en 2003 a 1,619 escuelas en 2010: los municipios con menor cantidad de escuelas (3 escuelas por municipio) fueron Magdalena Tlacotepec y Santo Domingo Chihuitán. Por otra parte, los municipios con mayor cantidad de escuelas son: Salina Cruz, Juchitán de Zaragoza, Matías Romero Avendaño y Santo Domingo Tehuantepec.

En lo referente a los servicios de salud, cabe reconocer que la Organización Mundial de Salud (OMS) establece que, más allá de una necesidad básica, la salud y el acceso a los servicios relacionados con la misma son derechos fundamentales para cualquier persona[2]. Los servicios de salud se definen como las acciones realizadas en beneficio del individuo y de la sociedad en general, dirigidas a proteger, promover y restaurar la salud de la persona y de la colectividad.[3]

Para el caso de los municipios oaxaqueños del Istmo, en el estudio encontramos que, del total de la población derecho-habiente a servicios de salud para el año 2000, el 52.13 por ciento tenía servicio de salud en el IMSS y el 27.64 por ciento al ISSSTE e ISSSTE estatal; para el año 2010 la población derecho-habiente a servicios de salud del IMSS era del 22.11 por ciento y la población con acceso al ISSSTE e ISSSTE estatal fue del 12.95 por ciento. Se observa que la tasa anual de crecimiento del 2000 al 2010 la población derecho-habiente creció en promedio 1.1 por ciento pasando de 159,092 en 2000 a 419,110 derecho-habientes en 2010. Se observa que la población sin derecho-habiencia a servicios de salud disminuyó pasando de 378,838 en 2000 a 236,802 personas. Por su parte, las familias beneficiadas por el Seguro Popular tuvieron una tasa anual de crecimiento de 1.1 por ciento en 4 años, pasando de 48,068 en 2006 a 107,332 familias beneficiadas en 2010.

Respecto al personal médico, los municipios con mayor número para ambos periodos de tiempo son: Salina Cruz, Juchitán de Zaragoza, Santo Domingo Tehuantepec, Matías Romero Avendaño, San Juan Cotzocón, Ciudad Ixtepec y San Juan Guichicovi; los demás municipios tienen entre 1 y 7 médicos. Respecto al número de unidades médicas, los municipios que cuentan con la mayor cantidad de éstas son básicamente los mismos que el de mayor personal médico, a excepción de Ciudad Ixtepec y Matías Romero Avendaño. La tasa anual de crecimiento de las unidades médicas 2000-2010 fue de 0.5 por ciento.

Cabe agregar que, en 2010 fueron beneficiadas 41,178 familias oaxaqueñas del Istmo por el Programa de Desarrollo Humano Oportunidades[4], cifra que incluye a las 14,436 familias que se incorporaron al programa en el periodo 2001-2010. Los municipios que más familias beneficiadas tuvieron fueron: San Juan Mazatlán, San Juan Cotzocón, San Juan Guichicovi, Matías Romero Avendaño, Juchitán de Zaragoza y Santo Domingo Tehuantepec; por otra parte los municipios que menor cantidad de familias beneficiadas por el programa Oportunidades fueron: San Miguel Tenango, Santo Domingo Chihuitán y Santiago Laollaga.

Veracruz: perfil socioeconómico

El estado de Veracruz está integrado por 212 municipios, con una superficie de 71,820.4 kilómetros cuadrados. La población total del estado tuvo una tasa de crecimiento anual de  0.8 por ciento, pasando de 6,908,975 personas en el año 2000 a 7,643,194 personas en 2010. Los 26 municipios que comprenden el estudio para el corredor del Istmo representan aproximadamente el 16% de la población de esta entidad federativa, pasando de 1,110,191 personas en 2000 a 1,209,446 personas en 2010. De hecho, los municipios de Veracruz en el corredor del Istmo que cuentan con mayor población son: Coatzacoalcos, Minatitlán, Cosoleacaque, Acayucan y Playa Vicente para ambos periodos de tiempo; los municipios con menor población son: Zaragoza, Soconusco, Oteapan, Tatahuicapan de Juárez y Oluta.

Así mismo, se observa que en promedio entre el 51 y el 51.2 por ciento de la población de los municipios analizados para ambos periodos son mujeres. Sin embargo, en promedio entre el 19.6 y el 23.6 por ciento de los hogares son con jefatura femenina. Esto pudiera deberse a dos factores, por un lado, que la población masculina está migrando en búsqueda de mejores oportunidades de empleo, y por otra parte, que aun cuando poco más del 50% de la población es femenina solo un 20% aproximado son jefas de hogar, lo cual podría deberse a que el resto reciben sus ingreso de su contraparte masculina.

En lo que se refiere al total de las viviendas particulares habitadas en los 26 municipios de Veracruz en el corredor del Istmo, se tuvo (entre 2000 y 2010) una tasa anual de crecimiento 0.6 y el 0.9 por ciento, pasando de 261,351 viviendas en 2000 a 325,368 en 2010. En cambio, el promedio de ocupantes tuvo una tasa anual de crecimiento para el periodo 2000-2010 de -0.8 por ciento. En promedio, los ocupantes de las viviendas particulares habitadas disminuyeron pasando de 4.5 ocupantes en el año 2000 a 3.9 ocupantes en el año 2010.

Por otra parte, se observa que en promedio entre el 68.4 y el 87.3 por ciento de las viviendas particulares cuentan con piso diferente de tierra para 2000 y 2010 respectivamente. Respecto a las viviendas particulares habitadas que disponen de agua de la red pública, éstas también tuvieron un incremento en sus tasas de crecimiento anual del 0.6, pasando del 49.9 al 60.1 por ciento de 2000 a 2010. Similarmente, el porcentaje de las viviendas particulares habitadas que disponen de drenaje, de sanitario y de energía eléctrica, mostró un incremento en su tasa anual de crecimiento 2000-2010 de 0.89, 0.8 y 0.7 por ciento respectivamente. Por su parte, las tomas domiciliarias de agua entubada y las tomas instaladas de energía eléctrica, mostraron una tasa de crecimiento promedio de 0.9 por ciento.

En lo referente a la educación, los municipios veracruzanos del Istmo muestran que, en promedio, menos del 50% de la población de 5 años y más cuenta con primaria, tanto en el año 2000 como en 2010. Este indicador es relevante pues muestra la habilidad que tiene la población de estos municipios de por lo menos saber leer y escribir, indicador básico para medir el nivel de bienestar de la población. Se observa también que hubo una caída en este indicador de 0.8 por ciento anual al pasar de 45.1% en 2000 a 39.3% en 2010, esto pudiera deberse no a un retroceso sino más bien a un avance en los niveles de escolaridad pues el porcentaje de población de 18 años y más con nivel profesional tuvo una tasa de crecimiento anual positiva de 1.0 por ciento pasando de 2.8% en 2000 a 5.5% en 2010. Lo mismo que para la población de 18 años y más con posgrado, pues tuvo un ligero incremento en promedio en el porcentaje pasando de 0.1 por ciento en 2000 a 0.2 por ciento en 2010. Por su parte, se tiene un grado de escolaridad (de la población de 15 y más años, en promedio) de 5.4 y 6.8 para los años 2000 y 2010 respectivamente. Otro indicador es sobre el total de escuelas en educación básica y media superior, el cual tuvo una tasa de crecimiento anual de 0.4 por ciento pasando de 3,220 en 2000 a 3,403 escuelas en 2010. Los municipios con menor cantidad de escuelas son: Zaragoza, Oteapan, Oluta, Soconusco y Nanchital de Lázaro Cárdenas. En contrapartida, los municipios con mayor cantidad de escuelas son: Minatitlán, Coatzacoalcos, Playa Vicente, Acayucan y Jesús Carranza.

Por otra parte, del total de la población derechohabiente a servicios de salud para el año 2000, el 63.37 por ciento tenía servicio de salud en el IMSS y el 8.30 por ciento al ISSSTE e ISSSTE estatal. En cambio, para el año 2010 la población derechohabiente a servicios de salud del IMSS era del 38.51 por ciento y la población con acceso al ISSSTE e ISSSTE estatal fue del 5.18 por ciento. Se observa que la población sin derecho-habiencia a servicios de salud disminuyó pasando de 719,601 en 2000 a 454,722 personas. Por su parte las familias beneficiadas por el Seguro Popular tuvieron una tasa anual de crecimiento de 2.0 por ciento en 6 años pasando de 31,884 en 2004 a 227,812 familias en 2010.

Respecto al personal médico, en promedio se observa en los municipios veracruzanos del Istmo una tasa anual de crecimiento del 0.7 por ciento, pasando de 1,321 en 2000 a 1,709 médicos en 2010. Los municipios con mayor cantidad de personal médico son: Coatzacoalcos, Minatitlán, Nanchital de Lázaro Cárdenas, Agua Dulce, Acayucan y Jáltipan.

En 2010 fueron beneficiadas 95,953 familias por el programa Oportunidades, cifra que incluye las 52,719 familias que se incorporaron al programa desde 2001. Los municipios que más familias beneficiadas tuvieron fueron: Playa Vicente, Soteapan, Acayucan y Hueyapan de Ocampo; por otra parte los municipios que menor cantidad de familias beneficiadas por el programa Oportunidades fueron: Nanchital de Lázaro Cárdenas, Ixhuatlán del Sureste, Oluta, Agua Dulce. Los municipios que contaron con una asignación menor de recursos ejercidos por el programa Oportunidades fueron: Nanchital de Lázaro Cárdenas, Oluta, Ixhuatán del Sureste y Agua Dulce; este último municipio tuvo un incremento significativo de recursos ejercidos por el programa Oportunidades al pasar de 782 miles de pesos en 2001 a 21,613 miles de pesos en 2010.

 

Comentarios preliminares

Se espera que los resultados del presente estudio realizado para conocer las condiciones actuales que presenta el desarrollo económico y social de sus habitantes pueda servir para tener elementos para la identificación de rezagos en el desarrollo socioeconómico, pero también las potencialidades de la población habitante correspondiente a aquellos municipios que quedan dentro de la zona de corredor.

Se observó que aunque ha habido tasas anuales de crecimiento positivas para el total de la población y el total de viviendas particulares habitadas, el promedio de ocupantes ha disminuido en ambas entidades federativas, esto pudiera deberse a que debido a las condiciones económicas de la región, las personas tengan que emigrar, ya sea a las grandes ciudades o al extranjero a buscar mejores oportunidades laborales con la finalidad de mejorar las condiciones socioeconómicas en las que viven, situación que se vio reflejada en el porcentaje de mujeres y de mujeres jefas de familia, así como también en la disminución del promedio de ocupantes en las viviendas particulares. En cuanto a las condiciones de las viviendas particulares habitadas, hubo mejorías tanto en las condiciones de las viviendas como en los servicios de éstas.

Por su parte, los indicadores que se refieren a la escolaridad, tanto a nivel estatal como del total nacional, hubo avances pues la educación ha llegado a más personas pero ésta sigue siendo de baja calidad pues los indicadores nos mostraron que los niveles del grado promedio de escolaridad de la población es en promedio de nivel primaria concluida, este indicador es clave en el desarrollo de la región pues el tener niveles bajos de escolaridad trae repercusiones tanto sociales como económicas.

Respecto a las condiciones de salud, se vio una disminución de la población no derecho-habiente a los servicios de salud en diez años; situación que se refleja en el incremento de las familias beneficiadas por el Seguro Popular para el término del periodo del año de estudio.

De manera general la zona tanto a nivel municipal (64 municipios de la zona del corredor) como a nivel estatal, muestra tasas anuales positivas de crecimiento a excepción del promedio de ocupantes (posible migración) y de la población sin derecho-habiencia a servicios de salud (por acceso a Seguro Popular). Estas tasas positivas, aunque pequeñas, muestran en alguna medida las mejoras socioeconómicas no solo a nivel municipal sino también a nivel estatal, pues el desarrollo tienen que ver también con el acceso a la red de saneamiento, al agua potable, y a los servicios sanitarios, variables que se analizaron tanto a nivel municipal como estatal; así como también el acceso a la educación, a la posibilidad de aprender a leer y a escribir. En este sentido se dice que el desarrollo de una región debe ser de carácter multidimensional.

Se pudo observar que las tasas de natalidad incrementaron en un mismo porcentaje tanto a nivel estatal como al nivel entidad federativa, característica de economías en vías de desarrollo. Este incremento de la población pudiera tener efectos tanto positivos como negativos, los positivos serían que al haber un incremento de la población se viera reflejado en incrementos del ingreso total, el efecto negativo sería que la zona económica no esté dotada del capital suficiente tanto físico como humano.

Las potencialidades de la zona son de carácter estructural, sobre todo en la estructura ocupacional y productiva de los municipios, pues esto hará que haya una menor migración de las zonas rurales a las urbanas y que se aprovechen los recursos económicos de la zona, teniendo como resultado mejores salarios y por lo tanto un mejor estilo de vida la población, reflejándose en un mayor acceso a servicios, pues en teoría cuando mejoran los ingresos de las personas, éstas empiezan a consumir no solo mejores alimentos y vestido, sino también a consumir productos industriales y a demandar más servicios como bancarios, turismo, etcétera.

 

Referencias

Deininger, K and Squire L. Economic Growth and income inequality, Finance & Development, March (1997).

INEGI. www.inegi.gob.mx.

Instituto Mexicano del Transporte. www.imt.mx.

Ray, Debraj, Economía del Desarrollo, Antoni Bosch, España (2002).

 

CRUZ Gabriela
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HERNÁNDEZ Salvador
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LELIS Martha
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[1] En septiembre del año 2000 se celebró, en Nueva York; la Cumbre del Milenio de las Naciones Unidas (ONU). En dicho evento, los jefes de estado y de gobierno de 189 naciones se comprometieron con el contenido de la Declaración del Milenio, para alcanzar, a más tardar en 2015, lo que se denominaron los Objetivos de Desarrollo del Milenio ODM). El propósito de los ODM es erradicar la pobreza extrema y el hambre, lograr la enseñanza primaria universal, promover la igualdad de género y el empoderamiento de la mujer, reducir la mortalidad infantil y materna, mejorar la salud reproductiva, intensificar la lucha contra el VIH/SIDA, el paludismo y otras enfermedades, garantizar la sostenibilidad del medio ambiente y crear una alianza mundial para el desarrollo. Los ODM buscar atender las necesidades humanas más apremiantes y los derechos fundamentales que todos los seres humanos deberían disfrutar. Por este motivo, y por primera vez en la historia de la ONU, se definieron metas e indicadores con el propósito de medir el grado de avance y cumplimiento de los 8 objetivos establecidos, y así dar puntual seguimiento a las mejoras en la calidad de vida de cientos de millones de personas en todo el mundo. www.objetivosdedesarrollodelmilenio.org.mx

[2] Organización Mundial de la Salud (2007), El derecho de la salud, Nota descriptiva, No. 323

[3] Censo de Población y Vivienda 2010, INEGI.

[4] La función del programa Oportunidades de acuerdo a la Secretaría de Desarrollo Social es la de coordinar acciones interinstitucionales para contribuir a la superación de la pobreza, mediante el desarrollo de las capacidades básicas de las personas  y su acceso a mejores oportunidades de desarrollo económico y social; es un programa coordinado que articula incentivos para educación, para la salud y para la nutrición, con el fin de promover el desarrollo de capacidades de las familias en extrema pobreza. Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL), Programa de Desarrollo Humano Oportunidades, 2010.