Notas
 
Instituto Mexicano del Transporte
Publicación bimestral de divulgación externa

NOTAS núm. 13, noviembre-diciembre 1993, artículo 1
Métodos de reposisción de vehículos
 

A fin de lograr un uso más eficiente de la energía en las flotas vehiculares, así como para controlar los gastos de mantenimiento de las unidades, es de gran importancia para el transportista conocer los diferentes criterios para renovación vehicular existentes a nivel internacional y saber cómo aplicarlos en el caso de México.

Es claro que el costo total de operación de un vehículo nuevo comúnmente es más elevado que el generado por una unidad antigua, ya que soporta mayores costos fijos por amortización de la inversión y por depreciación. Sin embargo, en contraparte, su consumo de energía es más bajo y ofrece una mayor disponibilidad.

Esta última característica es más apreciada en tanto más competido es el mercado, en razón de la oportunidad de captar carga y de generar ingresos, además de las consecuencias positivas en la relación con los usuarios, al prestar un servicio confiable y de mejor calidad.

Comprar unidades nuevas permite también programar un mantenimiento preventivo desde el inicio de su incorporación al parque vehicular, lo que facilita una conservación adecuada y la reducción de los gastos de mantenimiento.

En torno a la reposición de vehículos es pertinente entonces abordar las siguientes preguntas:

¿Cuándo se debe tomar la decisión de reponer una unidad?

¿Cómo hacerlo?

¿En cuánto tiempo es preferible renovar la totalidad de una flotilla?

Para dar elementos que permitan responder a las preguntas anteriores, se presentan a continuación en forma breve, los métodos de renovación más utilizados por las empresas de transporte en el ámbito internacional.

METODOS DE RENOVACION VEHICULAR.

Existen varios métodos para decidir sobre la renovación de los vehículos. Cada método tiene su propio grado de complejidad, la posibilidad de implantarlo depende básicamente del sistema de registro de información estadística disponible en las empresas de transporte.

A continuación se presentan cuatro métodos de renovación vehicular: Reposición de Activos, Costo Unitario Anual, Margen de Utilidad Anual y Costo Anual de Posesión.

1.- Reposición de Activos.

Este método compara anualmente el Valor Residual (VR) de un vehículo contra su Costo Acumulado de mantenimiento (CM). El Valor Residual (VR) es el valor comercial de reventa; cuando se desconoce este valor en el mercado secundario de vehículos, una estimación aceptable se obtiene considerando su valor residual contable (depreciación en 10 años), al que se agrega el valor de las refacciones y partes utilizadas en la conservación de la unidad.

Con estos valores anuales obtenidos, se elabora una gráfica en la cual se presentan los valores de VR y CM contra el tiempo. Bajo este criterio, el momento óptimo de reemplazo del vehículo está determinado por la intersección de las curvas VR y CM. Este método tiene la ventaja de su facilidad de implantación y la desventaja de no considerar al vehículo como un equipo cuyo propósito es "producir" el mayor número de toneladas-kilómetro posibles.

2.- Costo Unitario Anual.

Es el Costo Total Anual de transporte (conjunto de gastos fijos y variables por familia de vehículos) dividido entre el kilometraje recorrido por la familia de vehículos en un año.

En este método la decisión para renovar un vehículo dentro de una familia, se toma cuando el costo unitario de esa familia sea mínimo, ya que esto representa el punto óptimo de reemplazo. Las ventajas del método son su simplicidad de cálculo y el considerar al costo de transporte en forma integral. Una desventaja del método es que pueden existir varios mínimos, especialmente cuando el kilometraje anual de los vehículos es irregular en el tiempo.

3.- Margen de Utilidad Anual.

Este método clasifica los vehículos por grupo de edades en orden decreciente de su utilidad de operación anual (ingresos menos costos totales). El punto de decisión se presenta cuando la utilidad se compara con una norma preestablecida por la empresa. Las clases de edad con margen promedio de utilidad por debajo de esta norma, son las que tienen prioridad de renovación.

La ventaja del método es que la decisión de reposición depende de la rentabilidad de los vehículos, sin embargo, para su aplicación se requiere información completa de la productividad de los vehículos.

4.- Costo Anual de Posesión.

Es el método de evaluación más completo y más preciso conocido hasta el momento. Se define como la suma de los costos anuales de depreciación, de mantenimiento e inmovilización (Costo de Posesión). A su vez, el costo anual de inmovilización es la suma de los costos fijos (menos el de depreciación) que soporta la unidad, mientras está parada en el taller o esperando flete, más la pérdida comercial que esto implica.

Cuando el Costo de Posesión empieza a fluctuar a medida que varían sus componentes, de tal forma que se observan varios máximos y mínimos en el tiempo, cada uno de estos mínimos coincide o representa un momento posible de reposición.

La ventaja ofrecida por este método es que toma en cuenta la totalidad de los costos del vehículo y permite elegir entre varias oportunidades de renovación. Sus desventajas radican en la necesidad de disponer de un sistema de contabilidad detallada, así como de una estadística actualizada sobre los días de inmovilización de los vehículos.

PRINCIPIOS Y CRITERIOS PARA INTEGRAR ESTOS METODOS EN UN PLAN PERMANENTE DE RENOVACION VEHICULAR.

A continuación se presentan tres principios, considerados como básicos, para poder integrar los métodos antes descritos dentro de un plan de renovación vehicular en una empresa de transporte.

  1. Establecer una unidad técnica de enlace a nivel de la gerencia general, esta unidad debe ser independiente de las demás áreas de la empresa.
  2. Acopiar la información requerida de almacén, taller y sobre la operación en forma descentralizada, aprovechando las ventajas de la micro-informática.
  3. Actualizar la información por vehículo mínimo dos veces al año.

Cualquiera que sea el método a utilizar, la decisión de renovación debe también tomar en cuenta la experiencia obtenida por la empresa en el manejo de sus vehículos, así como criterios de sentido común tales como:

  • La selección de un vehículo debe ser considerada una decisión de cáracter técnico.
  • El vehículo IDEAL no existe y nunca existirá;
  • Una renovación adecuada es la que busca equilibrar la estructura de la flotilla por clase de edad;
  • Una renovación eficaz es la que permite homogeneizar la flotilla en torno a una o dos marcas de vehículos;
  • Una renovación oportuna es la que usa instrumentos predictivos;
  • Una renovación exitosa es la que conduce a seleccionar el vehículo más adecuado para la actividad de la empresa.
  • Por último antes de pensar qué vehículo comprar, hay que preguntarse cómo vender la unidad antigua que se va a sustituir.


Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo., Investigadora del IMT

Con base en el Seminario-Taller "Reposición de Vehículos: Impacto sobre el Costo de Mantenimiento y el Ahorro de Energía", impartido por el Dr. Laurent Dartois en las instalaciones del Instituto Mexicano del Transporte el 2 de agosto de 1993.

 

 
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